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BREVE HISTORIA DE UN MISTERIO CONDENADO, QUE NO ACLARADO...
En mayo de 1991, la desaparecida revista Espacio y Tiempo, dirigida por el Dr. Jiménez del Oso, recogía en primicia informativa el descubrimiento de un extraño cráter submarino en la Bahía de Cádiz. La noticia causó gran expectación, ya que el autor del reportaje, el investigador gaditano Jesús Borrego, relacionaba esta enorme fosa con la posible existencia en la zona de una base secreta de OVNIs.
Rápidamente varios medios de comunicación del país se hicieron eco de la noticia, pero tras un fugaz comienzo, donde incluso TV-3 llegó a realizar un exhaustivo documental, el tema cayo en el olvido...
Sin embargo la investigación no había concluido, ni mucho menos...
El propio Borrego nos refresca la memoria sobre los inicios de este apasionante enigma, en el confortable salón de su domicilio; "Nadie conocía la existencia del cráter en Cádiz, amigo Caravaca, hasta que en 1988, Joaquín Hernández que estaba realizando un reportaje fotográfico desde una avioneta, capto una imagen inusual de la bahía, cerca del puente Carranza, donde se apreciaba una mancha circular en el fondo de mar. La verdad es que se deben de dar una circunstanciales especiales para que el cráter sea apreciado desde alto, como marea baja, poca corriente, etc. Las fotos llegaron a mis manos y comencé a investigar. Hasta los mas ancianos pescadores del lugar se extrañaban al observar la fotografía, no podían creer que eso estuviera allí, (aunque si conocían otros datos, les asombro la perfección de la circularidad de la fosa...)
Curiosamente, puedo decirte, que en las modernas cartas marítimas no aparece el cráter por ningún lado, sin embargo fijate que curioso, ya en el lejano Siglo XVIII, el Brigadier de la Real Armada D. Vicente Tofiño de San Miguel (1789) lo deja reflejado perfectamente en una carta de navegación, extraño ¿no?...
En un principio hay que aclarar que el cráter se originó posiblemente por el impacto de un meteorito hace miles de años, los restos de meteoritos que hemos recogido en su borde y periferia así parece evidenciarlo. Tiene un diámetro de unos 300 metros mas o menos y su profundidad es de al menos 25 metros. La verdad es que no hemos podido saberlo con exactitud, por que siempre hemos tenido problemas a la hora de verificar su profundidad, es realmente paradójico. Una vez tiramos una gran plomada en el centro del cráter y a los varios metros comenzó a oscilar como arrastrada por la corriente. Te puedo contar que ha habido submarinistas que han bajado a la fosa y han acabado a centenares de metros de ellas arrastrados por esa misteriosa corriente que existe en el canal. Es más, hace pocas semanas, verano del 2000, fui a la zona con un buen amigo, con la intención de seguir con la exploración, y cuando se hallaba en el interior del cráter, "algo" metálico golpeó fuertemente su botella de oxigeno y salio despavorido del lugar. La verdad es que los submarinistas sienten un gran respeto por el cráter. Imaginate bajar por ese inmensa fosa oscura, donde los focos apenas pueden penetrar en su interior. He de confesar, que personalmente solo me he atrevido a asomarse a su borde. De todas formas te adelanto que en breve, iniciaré un nuevo sondeo en la zona que aclare todas estas interrogantes, o eso espero".
Sobre su hipotética relación con los OVNIs, Jesús Borrego nos aclara algunos puntos;
"En su día se especuló con la posibilidad de que fuera una base extraterrestre pero hoy día, ya no está tan claro, aunque no descarto que en alguna ocasión sirva de refugio para OVNIs . Lo que si te puedo confirmar es que contamos con decenas de testimonios de personas que han observado apariciones de extrañas luces en las inmediaciones del cráter, eso es innegable. Sobre todo hablamos de pequeñas esferas luminosas que se entretienen saliendo y entrando en el mar. Además por si fuera poco, también hemos hallados unas inexplicables huellas submarinas a unos 500 metros del cráter que parecen rodadas de algún tipo de maquinaria enorme...
De hecho toda la costa gaditana es enigmática, existe otra zona en la bahía, frente a la Caleta, donde se ubica una gigantesca fosa submarina que es muy frecuentada por los OVNIs, y donde se han estrellado y desaparecido misteriosamente varios aviones y barcos. Es mas en muy poco espacio de tiempo se estrellaron en un mismo área un F-5 y un helicóptero.
Pero hay mas incidentes relacionados con los OVNIs. Quizás el mas significativo sea el ocurrido la noche del 5 de septiembre de 1979 cuando sobre las 23:30 se observó un enorme OVNI luminoso a unas dos millas del castillo de San Sebastián que se sumergió en el mar. Posteriormente se acerco a la costa, hasta colocarse de repente, sobre la vertical de la catedral de Cádiz. Afortunadamente un reportero del Diario de Cádiz, el Sr. Movellán logró obtener unas impresionantes imágenes del objeto, donde se aprecia perfectamente la estructura del OVNI; de forma discoidal, de unos 40 m de diámetro y estructura cóncava en su parte inferior, con muchos salientes y protuberancias cuajadas de luces de distintos colores, entre ellos el blanco de diferentes matices, el rosa, el rojo, el verde, y el azul. En su parte central ofrecía varios focos de color blanco y se le pudieron apreciar un cilindro saliente con "escotilla" abierta y en ambos extremos, dos luces posicionales que cambiaban de color, predominando el blanco. Algunos testigos dicen que se sumergió en el mar...
El incidente fue portada en el Diario de Cádiz, y gracias al madrugón que me pegué, pude recuperar al menos los negativos utilizados en la rotativa, por que los negativos originales desparecieron al ser enviados a Madrid..".
Precisamente unas nuevas fotografías del cráter de Cádiz, obtenidas en Abril de 2001, colocaban de nuevo el asunto en la más rabiosa actualidad...
"Ésta nueva exploración - me comenta Jesús Borrego a las pocas horas de recibir las fotografías- ha descubierto que existen otros cráteres submarinos en el área muy próximo al ya conocido. En un de las fotos se aprecia claramente, como junto al gran cráter, existen dos pequeñas fosas mas a su lado, ¡extraordinario!".
Aunque desde hacia tiempo, el meticuloso Borrego conocía la existencia de otras pequeñas fosas junto al gran cráter de casi 300 metros, era la primera vez que había podido conseguir pruebas palpables de ello.
El autor junto a Jesus Borrego y el periodista Luis Mariano Fernandez
LA VERDAD SALE A FLOTE EL 29 JULIO DE 2001
Todo estaba preparado para que aquella mañana embarcáramos rumbo a los cráteres de la Bahía de Cádiz. Jesús Borrego había organizado una exploración marítima con el solido objetivo de demostrar, de una vez por todas, la realidad palpable de un misterio que duraba ya demasiado tiempo...
Los "ufólogos escépticos" de la capital gaditana, "asustados" por la repercusión del asunto, decidieron desde un primer momento dirigir sus esfuerzos en negar por activa y por pasiva la existencia del cráter...
Desde que la noticia saltara a la palestra, éste colectivo de supuesta investigación OVNI, ha esgrimido mil y un argumentos para desacreditar todas las informaciones que surgían sobre el supuesto cráter submarino. Llegando a "pontificar" que allí en la bahía no había nada extraño, y mucho menos un cráter submarino desconocido.
Pero curiosamente, en contra de sus propias y continuas afirmaciones, reclamando y exigiendo una investigación seria y científica del fenómeno OVNI, no movieron un solo dedo para confirmar sus sospechas... aun encontrandose el misterio a las puertas de sus casas... grave error...
Mas que en ningún otro suceso de éstas características, en el presente caso, se evidencia a gritos, la forma de actuar de estos "negadores" profesionales... pero volvamos a nuestro periplo marítimo...
LA CONFIRMACIÓN
Frente a la costa y de cara a la bahía nos esperaba nuestro anfitrión y jefe de expedición Jesús Borrego, oteando el horizonte. Sin muchos preámbulos acometimos nuestra empresa.
A bordo del barco San Antonio, capitaneado por un joven y experimentado lobo de mar, Antonio M., zarpamos desde el puerto de Puerto Real con destino a la zona donde las fotografías e indagaciones de Borrego señalaban como la supuesta ubicación del cráter. Aunque nuestra primera sorpresa no tardaría en llegar...
La tripulación de la embarcación conocía sobradamente la existencia de las depresiones submarinas y sus extremados desniveles por su lógica familiaridad con la bahía. Lo que nunca habían intuido, es que aquellos hoyos eran perfectamente circulares...
No sería el ultimo sobresalto del día.
Sobre la cubierta del barco y mientras llegamos a nuestro esperado destino, Jesús Borrego nos narra algunos de los avistamientos habidos en la zona y que le hizo plantear una hipotética vinculación entre la fosa y los enigmáticos OVNIs:
"Antes de conocer la existencia del cráter, a mediados de los 80 investigué un caso muy curioso. Todo comenzó cuando el matrimonio formado por José Antonio Mestres y su esposa Josefa Muñoz, se dirigían en su coche hacia Cádiz por la carretera de Matagorda. Serían las 8:30 de la tarde y se hallaban cerca del Puente Carranza, era un viaje tranquilo hasta que a la altura de los astilleros de Puerto Real se quedaron maravillados cuando vieron un espectáculo inédito. Del mar surgían unas extrañas burbujas de colores azul celeste, naranja y verde esperanza. Estas esferas de luz, de un tamaño reducido, salían muy lentamente del mar, luego se suspendían en el espacio estáticas y a continuación salían disparadas hacía el firmamento, a tanta velocidad que daba la sensación que se apagaban, comentaron los testigos. El fenómeno fue contemplado por el matrimonio Mestres en compañía de sus dos hijos menores por el espacio de unos 15 minutos Posteriormente, cuando conocí la ubicación del cráter, comprobé que estos hechos acontecieron sobre la enorme fosa submarina, ¿casualidad?...
Foto aerea del crater (sin retoques)
Fotografia retocada para realzar las fosas submarinas (solo efectos de contrastes)
Curiosamente extrañas burbujas de colores han sido también atisbadas en otras localizaciones donde se habla de la presencia de OVNIs bajo el mar. Uno de estos lugares mágicos es la zona de Baleares, conocida por los investigadores como el Triangulo del Silencio, donde los pescadores hablan de frecuentes avistamientos de "burbujas de luz que salen de los fondos marinos".Recordamos también, en relación a los OVNIS y el cráter, el incidente vivido por el investigador sevillano Antonio Espino, que en agosto de 1999 desde la playa de las Redes (Puerto de Santa María) sobre las 24:00 horas, observó una extraña luz blanca del tamaño de Venus sobre la punta San Felipe en el extremo de Cádiz . Comenzó a desplazarse y tras girar noventa grados, sobrevoló toda la capital gaditana lentamente hasta que se situó, pasando el puente Carranza, a unos 40 metros de altura sobre la vertical del mar. "Entonces -según palabras del propio Antonio Espino- la luz parecía bailar, se detenía, desaparecía y volvía a aparecer en otro punto, avanzaba hacia delante y hacia atrás... hacia arriba y hacia abajo, pero lo mas curioso del caso es que cuando la observé con ayuda de los prismáticos que tenía en mi coche, parecía que la luz giraba en su interior, lanzando chipas como las de las ruedas de fuegos artificiales, era realmente extraño"."La experiencia duraría en su conjunto -continua nuestro testigo- una media hora y os puedo asegurar que aquello no era normal, los movimientos se realizaban sobre una zona concreta pasando el puente Carranza." La observación se produjo sobre las inmediaciones del cráter... ¿otra casualidad?...
EL SONAR NO MIENTE
Pero volvamos una vez más, a retomar nuestra travesía. En esos momentos, a escasos minutos de nuestra partida, el capitán del navío requirió nuestra presencia en cabina. En el estrecho habitáculo del barco, nuestra mirada se clavó en el sonar, tal como nos señalaba el patrón. Allí estaba la confirmación inapelable del misterio.
"En esta parte de la bahía la profundidad no excede de los 5, 6 metros, dependiendo de la marea , pero fijaos como ahora,... de golpe... bajamos hasta los 18 o 22 metros". La gráfica del sonar no nos engañaba, un pequeño precipicio se dibujaba ante nuestros ojos, demostrando la ubicación del primer cráter "esta depresión puede tener un diámetro de unos 280-290 mt aproximadamente, la profundidad varia según la marea, pero cuando ésta baja, uno puede acercarse al borde de la fosa y el agua le llega por la cintura... ".
Al salir de la oquedad la profundidad vuelve a estabilizarse, y raramente excede los 10 metros nos comenta nuestro capitán (En sondeos posteriores, Jesús Borrego ha localizado zonas del interior del cráter, de mayor diámetro, que pueden llegar hasta los 30 metros de profundidad).
El sonar señalaba la existencia de la gran depresion
Pero nuestras pesquisas y descubrimientos no acaban ahí. El veterano ufólogo gaditano nos reservaba otra sorpresa. La existencia de otra fosa submarina. Y de nuevo la lectura del sonar nos ratificaba sus afirmaciones.
"La otra fosa, es menor, pero la pendiente de la caída es mas recta"- exponía el capitán del navío mientras perplejos veíamos la gráfica del sonar.
Y no desatinaba el buen marinero, a no excesiva distancia del primer cráter, a unos 700 metros, la profundidad máxima en aquellos instantes no superaba los 4 metros, y de pronto el abismo. 25 metros de caída libre se dibujaron en la pequeña pantalla del sonar.
"Hemos pasado -nos señala Antonio- de los 4 metros, a los 25 de golpe, y fijaos en la perpendicular que dibuja el sonar". Sin lugar a dudas, las fotografías aéreas no mentían, las fosas estaban allí. Una y otra vez el capitán hizo deslizar su barco por la periferia del cráter para recrearnos en su caída en el pequeño monitor. "Esta fosa es menor que la anterior y puede tener entre unos 150 mt y 200 mt de diámetro aproximadamente".
Así concluyo la presente aventura.
Y EL QUE PUEDA QUE SE CONFIESE...
Tras décadas de ardua discusión el enigma estaba parcialmente desvelado. Durante esta última década, como decíamos anteriormente, muchos han sido los intentos, por parte de determinados grupos ufológicos por desprestigiar el asunto de los cráteres. Negando lo evidente. Y simplemente por una razón. Por vincularse con la problemática OVNI. Recriminaron hasta la saciedad la supuesta invención por parte de los ufólogos locales de la existencia en la bahía de aquellas "fosas fantasmas". Certificaban desde su "poltrona" que todo era un gran fraude, una gran farsa, una mentira más, un engaño mas...
Pero resulta paradójico, anecdótico y hasta chocante, que los máximos defensores del dato, del metro, de la posición de Venus, del globo sonda, de la chatarra espacial, del método científico, de la lupa, de la brújula y del manual del perfecto boy-scout falten a la verdad de una manera tan descarada. "La zona de los hoyos -nos decía para más INRI Antonio M.- es conocida por todos los pescadores del lugar desde hace mucho, mucho tiempo, es una cosa harta conocida. Todos sabemos de la existencia de esos huecos, no se quien puede dudar de ello, será por que nunca ha navegado por aquí".
Y por si no fuera suficiente estas últimas evidencias aportadas, Jesús Borrego no quiere dejar cabos sueltos, y por eso, a parte de las míticas fotografías del cráter logradas en 1988 por Joaquín Hernández, en las que la gran fosa se deja ver como un enorme ojo submarino. El perspicaz ufólogo gaditano ha conseguido obtener nuevos documentos gráficos, que corroboran que la fosa submarina sigue allí, que no se ha evaporado, y que las primeras instantáneas no se debían a ningún tipo de error técnico o de malinterpretación.
Sobre el origen y naturaleza de estas depresiones todo son conjeturas y suposiciones hasta el momento. Aunque la localización de varios supuestos "meteoritos" en sus alrededores, podrían apuntar a que hace miles de años se produjeron varios impactos en la zona...
"Con estas pruebas que hemos recogido -nos señala con buen criterio Jesús Borrego de camino a puerto- no creo que haya nadie en su sano juicio que pueda negar lo evidente, otra cosa es su posible relación con los OVNIs, ahí respeto las opiniones de cada uno. No obstante os diré qué, en paralelo de estas exploraciones, que no han tenido otro fin que el de demostrar un hecho palpable, he podido seguir recopilando sucesos extraños alrededor de la zona de los hoyos, que vendrían a confirmar que tampoco andaba muy desencaminado cuando hablaba de la actividad OVNI que se producía en este lugar concreto de la bahía. Actualmente estoy investigando un caso muy interesante, en el cual un barco de pesca estuvo a punto de irse a pique por que una fuerza misteriosa e invisible tiraba de sus redes hacia el fondo marino, la tripulación al completo habían visto hacía escasos minutos, una enorme burbuja de agua que surgía del mar. Si no llegan a cortar las redes, posiblemente el barco se hubiera hundido... ¿Y sabes donde ocurrió esto?... muy cerca de los cráteres... habrá que seguir indagando".
Y no es para menos, hace poco tiempo tuve conocimiento de un incidente muy parecido al vivido por el pescador gaditano ocurrido hace mas de 50 años. En esta ocasión el protagonista fue un marinero malagueño que en las inmediaciones del cráter vio surgir la misteriosa burbuja de agua frente a la quilla de su barcaza... hacia peligrar la estabilidad de la misma... Sin duda algo inquietante ocurre en aquella zona de la Bahía... seguiremos informando...
jacarav@ca
Prohibido la reproduccion total o parcial del material incluido en el presente blog sin previa autorizacion del autor . Propiedad de Jose Antonio Caravaca.
El 24 de junio de 1947 a su llegada al aeropuerto de Yakima (Washington), Kenneth Arnold no podría imaginar que su singular avistamiento, daría paso a lo que se ha denominado la era moderna de los OVNIs. Este piloto de Minnesotta había observado durante su vuelo una formación de nueve extrañas aeronaves sobre el Monte Rainier que no supo identificar. Arnold relató a los periodistas, que los objetos se movían a una velocidad aproximada de 1.200 millas por hora (1930 Km/h), con un movimiento parecido a de un platillo arrojado sobre la superficie del mar. Este fue el momento, en el cual, se acuñó a estos objetos con el sobrenombre de "platillos volantes", al confundir los periodistas su tipo de movimiento con su forma.
En un primer instante, y en contra de lo que pudiera parecer, por los efectos que tendría posteriormente su observación, Kenneth Arnold nunca pensó que había sido testigo del vuelo de naves procedentes del espacio exterior (léase extraterrestres), sino que por el contrario, creía que había sido testigo del vuelo experimental de algún nuevo prototipo de avión a chorro o misil de la USAF.
Sin embargo, la Fuerza Aérea Norteamericana, así como otras agencias gubernamentales implicadas en la investigación del hecho, le comunicaran al intrigado piloto que en aquellas fechas no se habían efectuado en la zona del Monte Rainier, ningún tipo de prueba experimental. En una misiva que envió Kenneth Arnold al Comandante en Jefe de la base de Wright Field Dayton en OHIO se puede ver claramente su opinión inicial sobre el asunto: "Es lamentable que no pueda proporcionar usted explicación a esos aparatos, pues estaba convencido de que pertenecían a nuestro gobierno".
El primer enigma de los OVNIs, los objetos observados por Arnold no eran en forma de "platillo volador".
Posteriormente, y con la noticia de nuevas observaciones, cerca de 900 avistamientos solo 30 días después del incidente de Kenneth Arnold, comenzó a extenderse las visiones de platillos volantes por todos el planeta...
ROSWELL, LA SOMBRA DE LA DUDA
Pocos días después del revuelo formado por Kenneth Arnold, la noche del 4 de Julio mientras una violenta tormenta eléctrica azotaba el desierto de Roswell, el ranchero William MacBrazel escuchó sobrecogido una fuerte explosión parecida a un "trueno metálico". Días después, y a pocos kilómetros del rancho Foster, MacBrazel encuentra una amplia zona cubierta de extraños trozos de metal. Algunos de los restos eran parecidos a pequeñas vigas de "madera de balsa" cubiertos de indescifrables caracteres. Los trozos de metal son asombrosamente ligeros y tras arrugarse vuelven inmediatamente a su forma original. MacBrazel comprueba la extraordinaria resistencia de las laminas a un simple arañazo. El ranchero cree que se encuentra ante un artefacto de los militares, aunque no le parece los habituales globos sondas, los cuales se han estrellado varias veces en su propiedad (1). Posteriormente tras hablar con el sheriff Wilcox y casualmente con la prensa, deciden ponerse en contacto con los militares de la base de Roswell. El 7 de julio, acompañado de Jesse Marcel (Mayor de los Servicios de Inteligencia de la fuerza Aérea) y Sheridan Cavitt, MacBrazel enseña el lugar donde se encuentra todos los restos. El día anterior ya habían tenido la oportunidad de observar perplejos algunos fragmentos traídos en la furgoneta por el ranchero a Roswell. "Lo que mas me impresionó de los restos a los que me refiero -relataría años mas tarde Marcel al investigador Staton Friedman- fue el hecho de que parecían pergaminos. Muchos de ellos tenían piezas en forma de "I" con símbolos que tuve que definir como jeroglíficos porque no pude interpretados, no podían ser leídos; eran sencillamente símbolos..."
INVESTIGACIONES OFICIALES SOBRE OVNIS
Oficialmente, al margen de la realidad o no del caso Roswell (3) el gobierno norteamericano estaba completamente desorientado, ante el creciente numero de avistamientos OVNIs sobre su espacio aéreo. Las autoridades no encontraban respuestas sobre qué podrían ser aquellas aeronaves que parecían desafiar claramente, a la que se creía, la nación mas poderosa del planeta. Uno de sus máximos temores, era que los rusos estuvieran desarrollando nuevos prototipos de aviones de combate o de espionaje. Por todo ello, la primera comisión oficial de estudio sobre OVNIs, surgió de una recomendación del General Nathan Twinning, donde resaltaba la importancia de una investigación seria sobre el asunto por parte de la USAF. El 30 de Diciembre de 1947, el Secretario de Estado James Forrestal (4) creó el Proyect Sign (Proyecto Signo o Señal), constituido por distintos científicos y especialistas del ejército para la evaluación de 273 informes OVNIs,. En poco tiempo los expertos del Proyecto Sign, ante la aparente perplejidad de sus superiores, llegaron a la conclusión de que los OVNIs eran naves procedentes del espacio exterior, ante la falta de explicación lógica de muchísimos casos.
En otro incidente ocurrido a finales de los 40, se especulaba con la posible hostilidad de los OVNIs. Este conocido incidente tuvo lugar el 7 de enero de 1948 en Kentucky, cuando el Capitán Thomas Mantell partía a bordo de su F-51 en una misión de interceptación de un enorme OVNI. Tras perseguir al objeto durante varios minutos, se perdió toda comunicación con el bravo piloto. Posteriormente los restos de su avión y "presuntamente" su cadáver, se encontraron esparcidos en varios kilómetros a la redonda. Muchos ufólogos han denominado a Thomas Mantell como el primer "mártir" de la ufología moderna...
Entre los avistamientos OVNIs mas destacados de estos primeros años, escogemos el protagonizado por los pilotos Clarence Chiles y John Whitted, testigos de alta credibilidad, por qué venían a demostrar que los OVNIs podían ser vistos por personal muy cualificado. El 24 de julio de 1948, durante un vuelo desde Houston (Texas) a Atlanta (Georgia), los pilotos observaron como una gran luz roja se acercaba peligrosamente al avión. Para evitar la colisión, Clarence Chiles desvió el DC-3, mientras veían pasar cerca de ellos, a 200 mt, un enorme objeto en forma de puro, con la parte delantera acabada en punta y una doble hilera de ventanas en el lateral. La parte inferior del OVNI irradiaba un color azul brillante y de atrás surgía una llama rojizo-anaranjada. El objeto se desplazaba a una velocidad de 805-1.127 Km/h.
Paul Trent obtuvo en 1950 una de las fotografias OVNIs clasicas por excelencia que han resistido el paso de los años y los analisis a los que han sido sometidas en busca de un posible fraude.
DEL PROYECT GRUDGE AL LIBRO AZUL
Por lo visto, a las mas altas esferas del gobierno, no les gustó demasiado la conclusión del Proyect Sign, y la enorme trascendencia que estaba tomando el problema de los OVNIs a nivel nacional, y por ello decidió crear en febrero de 1949 otra comisión de estudio denominada Proyect Grudge (5). Una de las principales funciones de este grupo, aunque oficialmente era el análisis y estudio de los avistamientos, era desacreditar el Fenómeno OVNI ante la opinión publica, buscando explicaciones convencionales a cada uno de los casos (6). Esta postura contradecía a un informe del anterior proyecto Sign, descubierto por el Capitán E.J. Ruppelt, que decía a grosso modo: "...dar a conocer a la opinión pública norteamericana, la existencia de seres "extraterrestre" podría producir una histeria colectiva...". Dicho informe se basaba en las consecuencias de la famosa emisión radiofónica de Orson Welles "La guerra de los mundos" del 30 de octubre de 1938.
Sin embargo los intentos de la USAF para confundir a la opinión pública no tuvieron mucho éxito, como lo demuestra una encuesta realizada el 23 de mayo de 1950, por la agencia GALLUP, cuyos evidentes resultados fueron los siguientes:
- El 92 % de los ciudadanos norteamericanos cree en los OVNIs.
- El 5 % cree en su origen "extraterrestre".
- El 3 % cree que son de origen soviético.
Ante tales resultados el proyecto Grudge volvió al ataque, creando un consejo consultivo denominado Project Bear (Proyecto Oso) bajo la dirección del capitán E.J. Ruppelt. Esta comisión recibe multitud de observaciones provenientes de pilotos, siendo éstos más precisos que los de cualquier avistamiento de una persona no cualificada. Con la creación de dicho proyecto el capitán Ruppelt, descubre que los científicos y militares están vivamente interesados en el tema OVNI.
El año 1952, se caracteriza por una gran oleada sobre el territorio norteamericano. El capitán Ruppelt contabilizó mas de 16.000 reseñas periodísticas sobre observaciones OVNIs en el plazo de 6 meses en 1952. Las llamadas telefónicas, la correspondencia, los informes de observación, abarrotan literalmente los circuitos de transmisión de todas las bases de la USAF, y en especial, los de información del ATIC (Centro de Información Técnica del Aire) de Dayton. Este atascamiento puede producir una catástrofe, pues se está entonces en pleno período de la guerra fría y el conflicto de Corea sigue adelante. En estas circunstancias, semejante obstrucción, de los circuitos de comunicación, podría acarrear graves problemas.
En marzo de 1952, el proyecto Grudge (7) es reemplazado finalmente por el Project Blue Book (Proyecto Libro Azul). Al mando de dicho proyecto, se encontraba el ahora comandante E.J.Ruppelt.
En el mes de julio de 1952, y en un año de frenética actividad OVNI, varios OVNIs invaden literalmente, el espacio aéreo mas restringido que existe en los USA. El 19 de julio de 1952 a las 23:30 Horas, dos radares del National Washington Airport localizan ocho OVNIs volando a 160-200 Km/h, sobre el distrito de Columbia, donde se haya la capital federal de la unión y donde se encuentra precisamente La Casa Blanca y El Pentágono. Esta zona como es lógico, está prohibido sobrevolarla. Uno de éstos OVNIs, alcanzó la velocidad de 10.000 Km/h. Hacia las 24:30 (00:30 por tanto del 20 de julio) despegan varios cazas a reacción desde las pistas de Newcastle AFB (Air Force Base, Base de las Fuerzas Aéreas), pues las pistas de Andrews AFB, aunque más cercanas, se encuentran impracticables de momento. Cuando dichos cazas llegan al lugar donde detectaron a los OVNIs, comunicaron por radio que el contacto visual era negativo, regresando por tanto a la base. Pero la noche no acababa ahí. De nuevo otra alerta OVNI sobre Washington. Se detectan la presencia de extraños ecos en el radar, e inmediatamente los cazas parten desde Newcastle AFB. M.Chambers (ingeniero de radio de la estación de Washington), cuando a las 5 de la mañana, abandonaba dicha estación observó como cinco enormes discos surcaban los cielos. El 25 de julio de 1952, un comunicado oficial declaraba explícitamente:
"...El departamento de defensa ha ordenado a los pilotos de caza derribar a los OVNIs que desobedezcan la orden de aterrizar...".
Oportunidades tendrían de hacerlo. El 26 de julio de 1952 los extraños objetos se dejan captar de nuevo sobre los cielos de Washington. A las 22:30 y a las 24:00 Horas partieron dos F-94 para interceptar a los OVNIs. Al igual que lo ocurrido el 19 de julio, dichos objetos desaparecieron ante la presencia de los cazas. El "juego" se prolongó durante la madrugada del 27 de julio hasta el cansancio de dichos pilotos. Al día siguiente los operadores de radar de Washington NA declararon que lo que habían captado era una estrella (¡). ¿Es posible que estos operadores de radio, confundieran el eco de una estrella con la de varios objetos en movimiento?...
El 29 de julio de 1952, ante la desconfianza de la opinión publica sobre la primera respuesta oficial, la USAF da lectura del siguiente comunicado, que no deja lugar a dudas sobre la importancia del hecho: "Ignoramos las causas de los fenómenos reseñados, pero estamos convencidos de que no constituyen amenaza alguna para nuestro país. No podemos saber de manera cierta si se trata de visitantes llegados de otro planeta o de un país extranjero, a nuestro juicio estamos ante fenómenos físicos que, en el actual estado de la ciencia somos incapaces de explicar..."
El año terminó con un increíble avistamiento OVNI, protagonizado por toda la tripulación militar de un B-29. El 6 de diciembre de 1952, el Capitán John Harter y el radarista, Teniente Sid Coleman, regresaban a su base después comandar un vuelo nocturno con su bombardero. De pronto Coleman advierte en el radar un objeto que parece desplazarse 8.047 Km/h. Momentos después, aparecen cuatro ecos más en las tres pantallas de radar del avión. Pueden confirmar los ecos visualmente, cuando el sargento Bailey observa una luz blanquiazul que pasó junto al costado del avión. Varias formaciones de OVNIs pasan cerca del avión, e incluso una de ellas sigue durante algunos segundos al bombardero. En esos instantes, un enorme objeto aparece en escena, y todos los OVNIs pequeños parecen entrar en el. Tras esta operación de recogida, el gigantesco objeto nodriza se alejó a la increíble velocidad de 14.484 Km/horas.
Consecuencia directa de la alarma social provocada por todos los episodios OVNIs ocurridos a lo largo del año, la USAF establece la normativa oficial JANAP-146 que considera san un "crimen sancionable con prisión hasta 10 años, y multa de diez mil dólares, a quien divulgue, al nivel de la base aérea, cualquier información sobre un caso no identificado". Toda la información referente a los OVNI, debe ser trasladada a un órgano consultivo-analítico, en este caso el vigente Proyect Blue Book, que seria el encargado, dado el caso, de comunicarlo a la opinión publica...
Además por si fuera poco la manipulación-ocultación que querían ejercer sobre los militares que avistaran OVNIs, la normativa JANAP-146 se extendía, eso sí con ciertas limitaciones, al personal de las compañías aérea civiles. Esta ágil maniobra, influyó notablemente en una reducción paulatina de los informes que llegaban a oídos de los investigadores y del publico en general.
CIA: OBJETIVO DESPRESTIGIAR EL FENÓMENO OVNI
En 1953, el Proyecto Libro Azul, había analizado 1.201 informes OVNIs, llegando a encontrar explicación a un 80% de los casos, el resto permanecía sin respuesta. En ese mismo año la Agencia Central de Inteligencia (CIA), toma cartas en el asunto. Con el beneplácito de la USAF, la CIA forma un comite de estudio dirigido por el Físico y experto en armas del ejército H. P. Robertson, junto a él, se escogen a reputados científicos, Luis Álvarez premio noble de Física, Samuel Goudmit, Decano del departamento de Física de los Laboratorios Nacionales y colaborador de Albert Einstein, Lloyd V. Berker, geofísico director de Associates Universities y el astrónomo Thorton L. Page. Las conclusiones del "Panel Robertson" no se hacen esperar;
- Los OVNIS no son hostiles y nada prueba que se deban revisar las ideas científicas corrientemente admitidas.
- Las alertas continuas a las que dan lugar sus apariciones podrían camuflar los eventuales indicios de acciones realmente hostiles.
Además, la posibilidad de una histeria colectiva ante una invasión espacial inexistente, otorga un amplio margen de maniobras para una guerra psicológica desencadenada por los enemigos potenciales de Norteamérica.
Por lo tanto, el temor de la CIA, era que posibles agentes secretos de distintos gobiernos pudieran influir en determinados grupos de creyentes OVNIS para acrecentar su desconfianza publica hacia las autoridades y el gobierno. El Panel Robertson recomendaba que la población fuera instruida para saber interpretar mejor lo que estaban viendo en los cielos; globos sonda, aviones, reflejos, etc, intentando así desmitificar por completo el Fenómeno OVNI. No obstante, la CIA añadía a este polémico "estudio", que era indispensable "reducir el interés publico por los platillos volantes" y desprestigiar todo el fenómeno de los OVNIS, con una campaña de "debuking" (descredito). Este momento, es crucial para entender la posterior política (sobre todo en la década de los 80) empleada por los servicios de inteligencia en su labor de desinformación.
Oficialmente el "ultimo" estudio subvencionado por el gobierno norteamericano fue el Informe Condon. El cual se encargó al reputado Físico Edward U. Condon en colaboración con la Universidad de Colorado, con el supuesto afán de intentar desvincular la investigación OVNI del estamento militar siempre bajo la sospecha de la manipulación y la ocultación de información OVNI. Las conclusiones de este comite fueron tajantes; el Fenómeno OVNI no existe. Antes, durante y después del resultado del Informe Condon, aparecerían sospechas fundadas de que de nuevo había existido manipulación en los resultados, y de que el estudio tenía prefijadas ya desde un principio sus negativas conclusiones.
Como colofón a tantos intentos de la USAF para desprestigiar al Fenómeno OVNI, no podemos dejar de señalar la "profunda conversión" que sufrió uno de los mas acérrimos defensores de la inexistencia de los OVNIS, y habitual colaborador durante décadas de este organismo. Nos referimos claro está, al Dr. Joseph Allén Hynek, que siendo un total escéptico sobre la existencia de los OVNIS, llevándole incluso a negar sistemáticamente uno a uno todos los casos que llegaban a sus manos (como asesor especial de la Fuerza Aérea en su condición de astrónomo), acabó cayendo ante la realidad de los OVNIs, bajo el peso de la innegable documentación recopilada.. Tras trabajar durante años codo acodo con la USAF, el Dr. Hynek arremetió con fuerza contra ella y sus métodos de trabajo, en su articulo Flying Saucers I have known (Los platillos voladores que yo he conocido) (8):
"...Basándose en hipótesis que no tienen nada de científicas ni serias -escribe Hynek- el ejército del aire de los USA formula unas demostraciones estadísticas complicadas, que parecen impresionar al profano, que ignora que paradojas puede llevar el método estadístico. Uno se ve obligado a deducir que las declaraciones periódicas hechas a bombo y platillo por la USAF, apoyadas en estadísticas inexactas, solo sirven para presentar el fenómeno ovni bajo una luz falsa. (...) Lo que sorprende es el rango intelectual de las gentes que dicen haber visto OVNIS, rango ciertamente por encima del nivel medio y en ciertos casos muy por encima. El testigo-tipo es honrado y serio. Es absolutamente falso decir que personas científicamente formadas jamas han visto OVNIS. Algunos de los mejores y mas lógicos informes provienen de tales testigos. Cuatro de estas observaciones han sido hechas por astrónomos profesionales, cuando estaban de servicio en sus observatorios, otras cinco por técnicos especializados, una de ellas informada por el director adjunto de uno de nuestros Laboratorios Técnicos a nivel nacional... Todos, salvo tres, versaban sobre ingenios brillantes e iluminados que maniobraban en el aire.
Jamas se ha hecho ningún examen verdaderamente científico del fenómeno OVNI, a pesar del enorme acopio de datos que se tiene". Mas claro agua.
El profesor Condon(izq) "rivalizó" con la pose del Mayor Hector Quintanilla, pasando del descredito de su antecesor al humor. Si bien las imagenes no parecen tener importancia el mensaje subliminal es claro. De la interrogante a la mofa...
NOTAS:
(1) Hay que señalar que los militares ofrecían una recompensa a los ciudadanos que ayudaran a la recuperación de los globos sonda que lanzaban desde la base de Roswell. Por lo tanto, MacBrazel ya había colaborado en varias ocasiones con el ejército y sabia reconocer perfectamente un globo sonda. Recordar que la superficie afectada por el cubrimiento de restos era de un kilometro de largo por 200 metros de ancho, zona imposible de cubrir por la caída o destrucción de un globo sonda.
(2) El comunicado es acompañado con fotografías de Marcel junto a los restos del objeto. Posteriormente, y una vez que las autoridades habían "identificado" los restos como partes de un globo sonda, se presentaron ante los fotógrafos con unos materiales metálicos evidentemente, pertenecientes a un globo sonda, que nada tenían que ver con los que en un principio el General Ramey había permitido mostrar a la prensa. Eso si a cierta distancia prudencial.
(3) No necesariamente toda la cúpula militar norteamericana y el gobierno debía estar informado sobre el asunto Roswell, por lo que seria lógico pensar que mientras existían personas que conocerían a fondo la realidad de los OVNIS, otros permanecerían en la mas absoluta ignorancia, indiferentemente de su cargo o posición en la sociedad.
(4) Varios investigadores afirman que James Forrestal, en disposición de su cargo, estuvo al corriente de toda la información OVNI disponible por el gobierno, incluyendo el controvertido caso Roswell. Forrestal siempre fue de la opinión de dar a conocer toda la verdad, estimando que se cometía un grave error al ocultar la existencia de los OVNIS a la sociedad norteamericana. Ante el temor de que el secretario Forrestal hablara mas de la cuenta, se le recluyo en un hospital militar. Se cree que tras reiterados intentos fallidos por borrarle la memoria, obstaron por eliminarle. Oficialmente el 22 de mayo de 1949, James Forrestal se suicidó saltando al vacío desde un 16 piso, en el Hospital Naval Bethesda donde se encontraba "recluido", donde por cierto, se decía que estaba "vigilado" día y noche.
(5) Para demostrar las "buenas" intenciones del Gobierno hacia el Fenómeno OVNI, veamos la traducción de Grudge: rencor, animosidad, despecho oculto.
(6) A su vez el Proyect Grudge recibió el encargo de "estudiar" otro misterio que se venía produciendo desde 1946, y que consistía en la aparición (más frecuentemente por la zona de Nuevo México) de ciertas bolas de fuego verdes que llegaban a alcanzar la estimable velocidad de 65.000 Km/h. Para ello, crea una subcomisión denominada Project Twinckle (Proyecto Centelleante). Esta se instala en Vaughn (Nuevo México), pero en tres meses de observación no aclara nada, trasladándose seguidamente a la Base Aérea de Holloman (Nuevo México), donde no se oye hablar más de ella, quizás tuvo algo que ver el comienzo de la Guerra de Corea.
El 9 de noviembre de 1951, el doctor Lincoln La Paz, del Instituto de Estudios de Meteoritos, observa durante 11 días consecutivos 7 caídas de bolas de fuego verdes, declarando posteriormente: "...En el transcurso de la historia, jamás se ha producido una caída de meteoritos en cifra igual a la quinta parte de ésta. De mantenerse esta proporción, yo creería que el fenómeno no es natural...".
Como confirmación de estas caídas, en Albuquerque (Nuevo México) se detectan ocho bolas de fuego verdes en el término de trece días. Nunca se encontró explicación a este fenómeno. Aunque el investigador Renato Vesco, para los puristas del dato, afirmaba en su libro "Interceptarlos sin disparar" (Ediciones 29, 1968) que estas visiones eran el resultado de la experimentación en secreto de cañones electromagnéticos por parte del ejército alemán. Según Vesco, estas poderosas armas fueron confiscadas durante la Segunda Guerra Mundial a los nazis en Schlosscrantzbah.
(7) El informe final del Proyecto Grudge, señalaba que de 244 informes analizados, 56 (o sea el 23%) permanecían sin respuesta.
(8) Articulo publicado en el Yale Scientific Magazine, vol. XXXVII, numero 7, abril de 1963. Publicación oficial de la prestigiosa Universidad de Yale.
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UN CASO PERFECTO
LA FUERZA AÉREA ENTRA EN JUEGO
El caso de Socorro fue concienzudamente investigado, entre otros, por la USAF (secretamente), por el controvertido Proyecto Blue Book también de la USAF, por el FBI y por otros organismos oficiales y privados como el APRO y el NICAP.
El Dr. Hynek, en calidad de experto de la Fuerza Aérea y escéptico aún ante la existencia de los OVNIS, acudió al pequeño pueblo de Nuevo México a los pocos días del incidente sin esperar nada relevante.
Un tanto de lo mismo hicieron el Capitán Richard T. Holder jefe del campo de pruebas de White Sands, el Mayor Connor de la base de Kirtland y el agente especial del FBI J. Arthur Byrnes Jr., llegando a una conclusión unánime y desconcertante para el incidente. Los expertos concluyen que el agente Lonnie Zamora decía la verdad sobre lo ocurrido y que no existía ningún tipo de fraude.
Incluso, la USAF aportó diferente material técnico que descartaba que el testigo hubiera visto un prototipo experimental secreto de las cercanas bases militares o que todo hubiera sido provocado por un vehículo de la NASA, que por aquel entonces trabajaba en los módulos espaciales (LEM) que utilizaría en la conquista de la Luna, pero que aún no eran operativos en aquellas fechas. A su vez, la Fuerza Aérea norteamericana eliminó un amplio abanico de posibilidades; helicóptero con problemas técnicos, cualquier tipo de globo atmosférico, prueba balística e incluso por descabellada que parezca en un principio, la probabilidad de que se tratara de un colosal "broma" perpetrada por un grupo de jóvenes de Socorro, para "vengar" las constantes multas de tráfico que recibían del agente Zamora...
La falta de respuestas parecían confirmar la veracidad del relato del austero policía.Y así lo hizo saber públicamente el estamento militar. En una conferencia de prensa celebrada al día siguiente del avistamiento de Zamora, el capitán Holder, declaraba oficialmente lo siguiente: "En la tarde del 24 de abril, las autoridades locales se pusieron en contacto conmigo y solicitaron mi ayuda para identificar un OVNI del que había tenido notificación. Informado sobre la situación, traté de determinar si el Polígono de Pruebas de Misiles de White Sands o bien la Base de Holloman de la USAF disponían de algún ingenio capaz de haber producido las condiciones descritas. Ni el campo de misiles de White Sands ni la Base de Holloman poseían un objeto comparable con el descrito. Y no se tenía conocimiento del desarrollo de ninguna operación de lanzamiento en ese momento capaz de haber originado las condiciones descritas.".
Aunque éste comunicado es substancial, la USAF, intentó por todos los medios evitar que se "filtrara" a la prensa la existencia de dos pequeños seres junto a la aeronave avistada por el policía. Sin duda aquel elemento en particular, era el mas desestabilizador de la narración de Zamora, y el que mas claro apuntaba hacia la posibilidad de que se tratara de un ingenio de origen no humano. Pero lamentablemente, para los militares, la noticia estaba en la calle y corría como un reguero de pólvora...
LA INVESTIGACIÓN OFICIAL CEDE ANTE LA EVIDENCIA
Por si fuera poco todo el revuelo montado en aquel pueblecito de Nuevo México, aparecieron algunos datos más que parecían avalar la inusual naturaleza del suceso reportado por el agente Lonnie Zamora.
El investigador Ray Stanford, enviado a la zona por el N.I.C.A.P ( National Investigations Committee on Aerial Phenomena), encontró, una piedra que había sido arañada y partida por una de las patas del tren de aterrizaje del objeto en su acercamiento a tierra.
En dicha roca, examinada en el Centro de Vuelos Espaciales Goddard (Greenbelt, Maryland), dependiente de la NASA, se hallaron, al microscopio, algunos restos metálicos, que al ser analizados demostraron que era una extraña aleación de hierro y zinc desconocida en la Tierra. Posteriormente, las valiosas muestras "desaparecieron" misteriosamente en los mismos laboratorios y el dictamen inicial fue "cambiado" por otro irrelevante..
Éstas, sin embargo, no fueron las únicas pruebas que se evaporaron en este trascendental suceso que podía haber cambiado el rumbo de las investigaciones y posturas oficiales sobre OVNIs en todo el mundo. Miembros de la USAF recogieron muestras de arena "vitrificada" y rocas de aspecto "burbujeante" que parecían haber entrado en contacto con la "fuente propulsora" del objeto. Nunca se supo que fue de aquel material. Así mismo, el agente Ted Jordan, compañero de Zamora, tomó varias fotografías de la zona, a los pocos minutos del percance, para realizar un informe oficial sobre el suceso. El carrete fue "requisado" por la USAF, con la promesa de su pronta devolución. Nada mas lejos de la realidad. Al parecer, en el revelado de las fotografías se comprobó que éste estaba parcialmente velado y presentaba unas extrañas características. Debido, tal vez, según los expertos a una radiación existente en el lugar, latente aún minutos después del despegue, y causada seguramente por la emisión de la "llama azul" del OVNI. Lógicamente este "revelador" material fotográfico nunca ha aparecido y no se notifico nada oficialmente a los policías de Socorro.
Avalando la existencia de una extraña radiación en la zona del aterrizaje, el Dr. Hynek comentaba en un informe, enviado al Dr. Donald H. Menzel y desclasificado en la década de los setenta, que algunas muestras tomadas en el lugar habían detectado una radioactividad inhabitual.
Si analizamos el testimonio del Sheriff, hallamos algunos datos significativos e importantes. La llamarada azul vista y descrita como un embudo por Zamora (acompañada por una "explosión"), pudo tratarse del momento exacto del aterrizaje del OVNI. El "pulido" de la aeronave hubiera impedido ver su estructura en el aire. Claramente, el misterioso objeto poseía dos tipos distintos de fuente de propulsión; un "giroscopio a chorro" para aterrizajes, despegues, y aproximaciones a tierra y un sistema desconocido, mas avanzado, silencioso y eficaz, para desplazarse a gran velocidad por el cielo...
Por todas éstas excepcionales circunstancias y por el propio relato de Lonnie Zamora, el avistamiento de Socorro, fue admitido como NO IDENTIFICADO (Caso Nº 8.766), por los estrictos miembros del Proyecto Libro Azul (Blue Book) del gobierno norteamericano. Siendo el ÚNICO informe NO EXPLICADO registrado en sus archivos, de los 12.618 casos recopilados y estudiados, que englobaba: ATERRIZAJE, PRUEBAS FÍSICAS (HUELLAS) Y VISIÓN DE OCUPANTES DE UNA AERONAVE DESCONOCIDA. El Mayor Héctor Quintanilla, al mando de dicha comisión gubernamental (1963-1969), reconocido por su extremada sobriedad y exacerbado escepticismo en relación a la problemática OVNI, escribía, en 1966, al respecto del suceso de Socorro, en la revista interna de la CIA "Estudies in Intelligence": "No hay duda de que Lonnie Zamora vio un objeto que dejó una honda impresión en él. Tampoco puede cuestionarse la credibilidad de Zamora. Es un oficial de policía serio, un pilar de su iglesia, un hombre versado en reconocer aeronaves en su zona. Está desconcertado por lo que vió y, francamente, nosotros también. Este es el caso mejor documentado que conocemos, y todavía no hemos sido capaces de encontrar el vehículo o cualquier otro estímulo que atemorizó a Zamora hasta el punto de llevarle al pánico".
El Dr Hynek fue aun más allá que su "jefe" cuando aseguró que el caso era: "de los mas importantes avistamientos de OVNIs en la historia del estudio del tema por las Fuerzas Aéreas"...
Ni siquiera Philip Klass, miembro fundador del CSICOP
(Committe for the Scientific Investigations of Claims of the Paranormal), y eterno escéptico en la cuestión de los OVNIs, pudo encontrar una explicación convincente al asunto de Socorro. Limitandose en las últimas fechas, rendido ante a la evidencia, a declarar que todo pudo tratarse de un "montaje" orquestado entre el alcalde y el agente Zamora para atraer turismo al pueblo...
Sin duda alguna, si el gobierno estadounidense se decidiera a desclasificar toda la información concerniente al encuentro de Lonnie Zamora y otros sucesos similares de igual solvencia, el estamento científico no tendría mas remedio que afrontar una investigación seria y rigurosa sobre los mal llamados "platillos volantes".
UN SÍMBOLO POLÉMICO
"Inmediatamente después del aterrizaje y despegue de la nave, Zamora dijo haber visto una insignia roja en el objeto. Poco antes de que llegar Chavez, dibujo en un papel el mencionado símbolo y se lo enseñó a sus compañeros y a algunas personas que llegaron en seguida. Según algunos agentes que hablaron con el instantes después del incidente, la insignia tenia la apariencia de una letra V invertida atravesada por tres líneas paralelas. Luego utilizó el idioma español para describirla al operador Mike Martínez y a otros policías de Socorro de la misma manera, aunque algunas personas creyeron recordar que Zamora había descrito las tres lineas como situadas directamente debajo de la V en vez de atravesandola. A continuación y hacia las 7:30 de la tarde del mismo día, el capitán del ejercito de tierra de los E.E.U.U. Richard T. Holder, y comandante de la Base Stallion Site, en White Sands, sugirió a Zamora que solo describiera la insignia a investigadores oficiales". De esta forma el investigador norteamericano Ray Stanford denunciaba públicamente la nada descabellada idea, de que el famoso símbolo del caso Socorro (la flecha bajo el arco) tan difundido y conocido a raíz del incidente, fuera modificado para que solo conocieran su verdadera "forma" los militares implicados en la investigación. Ocultando este importante dato, se facilitaría a las futuras comisiones de estudio el poder autentificar posteriores avistamientos OVNIs. El propio Dr. Hynek, entrevistado por la emisora local de Socorro la KSRC, el 29 abril de 1964, describía ante el micrófono del periodista Walter Shrode el extraño símbolo de una forma distinta a la oficial: "Como una V invertida con una especie de barra cruzada".
OTROS INCIDENTES DESCONCERTANTES
El 26 de abril, solo dos días después del escandalo de Socorro, alrededor de las tres de la madrugada, un granjero llamado Orlando Gallego observó el aterrizaje de un OVNI que deprendía una extraña luz azulada a menos de 70 metros de su posición. El objeto era muy similar al de Zamora y esta vez, tomo tierra en la localidad de La Madera, Nuevo México. El Sr. Gallego aseguró que desconocía por completo el avistamiento ocurrido en Socorro, y oficiales de policía desplazados al lugar de los hechos, entre ellos el capitán Martín Vigil, encontraron rastros de quemaduras en la zona del aterrizaje y cuatro inexplicables huellas de hendiduras en el suelo.
ABONO PARA EL PLANETA MARTE
Pero quizás el caso que trajo mas polémica y controversia, relacionado con el incidente de Socorro, fue el narrado por el agricultor Gary Wilcox que aseguró incluso, haber entablado diálogo con los tripulantes del OVNI. El Sheriff Paul J. Taylor, del condado de Tioga (Nueva York) le tomó la siguiente declaración jurada al testigo; "Alrededor de las 10 de la mañana del viernes pasado, 24 de abril de 1964 (horas antes del encuentro Sheriff Zamora) estaba abonando uno de mis campos situados al este de mi casa. El cielo estaba despejado y el sol brillaba. La tierra estaba seca. Miré hacia lo alto de la colina desde el campo donde estaba trabajando y advertí un objeto brillante en lo alto de la loma. De momento pensé que era la nevera abandonada cuya presencia allí yo conocía. Pero al mirar por segunda vez, observé que el objeto no parecía ser tal nevera, sino otra cosa. Entonces empecé a conducir el tractor, con el que remolcaba el distribuidor del estiércol, loma arriba en dirección al objeto. La distancia que había desdes el pie de la colina, desde el punto donde yo advertí por primera el objeto, hasta la cúspide de la misma, era de unos 800 metros. Cuando estaba a unos 100 metros, pensé que podía ser el deposito de combustible de un avión, de esos que se llevan bajo las alas. Detuve el tractor y cubrí a pie los últimos 100 metros que aun me separaban del objeto. Lo primero que advertí fue que no tocaba en el suelo y que era algo mayor que un automóvil en cuanto a longitud. Era de forma oblonga, como un huevo gigante. No mostraba uniones, ni pernos ni nada parecido. Era completamente liso y tenía color de aluminio. Toqué el objeto y me pareció que el metal era mas duro que el aluminio; no conseguí moverlo. No podría decir si se sostenía sobre patas o flotaba en el aire. Mediría unos 6 metros de largo por 1,20 de alto y de 4,50 a 4,80 de ancho. Mientras lo tocaba no percibí la menor vibración ni sonido, ni tampoco lo noté caliente. Mientras me dedicaba a examinarlo, dos hombrecitos de una talla que yo calculé en 1,20 salieron de debajo del objeto. No vi por donde salían. Cada uno de ellos llevaba una bandeja de poco más de un palmo cuadrado.
Era del mismo material que el objeto y llevaban lo que me pareció terrones". Los seres, que no tenían facciones en la cabeza, eran mas ancho de lo normal y según el Sr. Wilcox carecían de manos y pies. Iban cubiertos de un traje blanquecido, como de aluminio, de una sola pieza. Al parecer los pequeños humanoides le hablaban telepáticamente, y le comunicaron que; "No te alarmes, ya hemos hablado con gente otras veces". "Somos de lo que vosotros llamáis el planeta Marte": Los "marcianos" le preguntaron al Sr. Wilcox que hacia allí y mostraron gran interés en la agricultura, sobre todo en el empleo del abono nitrogenado (conociendo la superficie del planeta rojo no nos extraña), pidiendole incluso una muestra al gentil agricultor. Le comentaron que solo podían venir a la tierra cada dos años y que estaban recorriendo esta parte del hemisferio. También le informaron que solo aterrizaban durante las horas diurnas, ya que su aparato era menos visible a la luz del día, manifestando su sorpresa a que el agricultor les hubiera descubierto. ¿Explica éste particular efecto de camuflaje, por qué el agente Zamora solo divisó la llamarada azul en el aire y no el objeto en si?. Tras varios minutos de amigable charla, donde los marcianos dijeron, entre otras cosas, que "estaban allí para aprender sobre nuestros materiales orgánicos", se introdujeron por debajo de la nave y tras escucharse un ruido, "como el de un coche en punto muerto, un zumbido apagado". El OVNI se elevó y tras deslizarse suavemente sobre el terreno despareció a 50 metros del testigo. Aquella misma tarde, el bueno de Gary Wilcox dejó un saco de abono en la colina y al día siguiente, comprobó que había desaparecido...
Posteriormente los investigadores galos encontraron múltiples evidencias en el terreno indicado por Maurice como presunto lugar del aterrizaje. Hallaron una huella de 30cm de profundidad producida por el eje principal de las "patas" del OVNI. Curiosamente la lavanda que cultivaba Masse no volvió a brotar en aquella zona, encontrandose una franja de 90 metros de largo por 3 metros de ancho, donde la hierba presentaba evidentes síntomas de un intenso calor. El agricultor aseguró a los ufólogos galos que mantenía en secreto una parte de la experiencia y que jamas la revelaría...
EL ENCUENTRO DE SOUTH HILL
Un suceso que guarda enorme similitudes con el reportado por el agente Zamora, sucedió el 21 de abril de 1967, cuando Cliff Crowder, administrador de Mobil Chemical Company, se topó en plena carretera, en South Hill (Virginia), un extraño objeto sobre el pavimento que le impedía continuar. El artefacto parecía un depósito de gasolina y descansaba sobre un conjunto de 4 patas. Se hallaba a menos de cien metros del testigo que declaró posteriormente: "tenía un brillante aspecto metálico, algo parecido al aluminio". Sin mas tiempo para observar mejor aquel fenómeno, una cegadora llamarada blanca surgió de debajo del objeto, que hizo que el OVNI saliera disparado hacia el cielo. En el lugar de los hechos una hoguera ardía sobre el firme de la carretera. La huella que dejó la llamarada fue observada y fotografiada por la policía del estado de Virginia, así como cuatro inexplicables marcas dejadas en el suelo por las cuatro patas del OVNI. La USAF también Investigó Y clasificó este encuentro como NO EXPLICADO (Caso Nº 11.677).
Posteriormente Raimundo fue en varias ocasiones al lugar con la intención de volver a verlos pero sin conseguirlo, pues la experiencia para el no había sido traumática. Yo escuche esta versión de su propia boca y creo que decía la verdad, mi abuela siempre le creyó"...
CUADERNO DE BITACORA DE UN CURIOSO EMPEDERNIDO, DEVORADOR DE LIBROS Y AMANTE DE LOS ENIGMAS... mi direccion de contacto: jacaravaca101@hotmail.com